Alejandro Pérez González
Muchos políticos se convierten en estas fechas en “santos papas Noel”, aunque ninguno se deje la barba y el bigote excepto el priista Eviel Pérez y su mostacho, pero bueno, muchos aprovechan esta temporada navideña y de fin de año incluyendo inicio de campañas para demostrar su afecto hacia ciertos periodistas, obviamente quienes les han tapado y saben de sus mentirillas y son precisamente aquellos que pelean los regalos y sobres amarillos quienes se delatan solos, a propósito quien no se quiere quedar atrás es el flamante diputado federal del PRD quien el día de mañana esta citando a sus más fieles allegados de prensa a un desayuno en el hotel el rancho, aunque están advirtiendo que quien no fue invitado y llegue de colado nomas no toca sobre amarillo ni regalo, bueno esto no sorprende ya que se sabe del carácter revanchista que se carga el clan soto-Almansa y los perredistas que se sienten cosiditos a mano jajá …
Hablando de política, aquellos que fueron engañados o sorprendidos por las mentiras de Paco niño, su padrino Benjamín Robles alias “el cara sucia” y la diputada local y mama, Ángela Hernández Solís, pues dicen que ya iniciaron la contra campaña en contra de este trió de mentirosos de quien dicen ahora no contestan los teléfonos celulares y nunca están en sus casas, oficinas, ni en la cámara ni en el senado, y es que a la hora de cumplir con sus promesas estos ángeles y demonios simplemente desaparecen y quienes creyeron en ellos se quedan con un palmo de narices ¡ qué bonita familia, que bonita familia…
Y siguiendo la polaca hay quienes dicen que en el próximo año regresan las mentiras y los mentirosos que aspiran a puestos públicos y es que en el caso de la actual administración quienes conformaban la planilla de regidores simplemente han hecho de las suyas faltando de corridito los dos años de gobierno, bueno casi casi por que los días quince y treinta de mes son los primeros que puntualmente llegan pero al cajero automático para verificar si les han depositado su cuota de concejales y para no lastimar sentimientos usted amable lector ya los ha de tener identificados y seguramente no querrá saber nada de ellos en las próximas campañas.